La bronquitis infecciosa es un coronavirus altamente contagioso que afecta de forma aguda el tracto respiratorio superior de las aves gallináceas (pollos, ponedoras y reproductores), con un período de incubación aproximado entre 18 y 36 horas posinfección, siendo susceptibles a ella los pollos de todas las edades, pero siendo más severa en los pollitos debido a que causa mortalidad la cual puede llegar al 25% en pollos jóvenes; sin embargo, esto puede variar dependiendo de diferentes factores como la edad (con el incremento de la edad, los pollos se hacen más resistentes a la enfermedad), infecciones simultáneas y condiciones ambientales.
Su transmisión ocurre por la inhalación de aerosoles que contienen el virus, tomando en cuenta que éste puede permanecer activo en instalaciones contaminadas por más de cuatro semanas, siempre que las condiciones del entorno sean completamente favorables (frío, humedad, ventilación deficiente); por lo tanto, la cercanía a granjas o aves infectadas representa un factor de riesgo a contagio.
¿CÓMO ACTÚA EL VIRUS?
- Una vez entra en el organismo, el virus se multiplica en la mucosa del tracto respiratorio.
- Después de aproximadamente 48 horas, y tras engrosarse la mucosa, comienza la fase aguda de la infección en la que los cilios en la tráquea se destruyen y se da una secreción excesiva de mocos.
- Cuando el virus llega al torrente sanguíneo, es propagado a epitelios mucosos tanto en el tracto reproductivo como urinario, acarreando complicaciones y síntomas en ambos sistemas.
- En la fase aguda, el virus llega a permanecer en el tracto digestivo (específicamente en las tonsilas del ciego) por muchos meses, lo que implica una excreción prolongada del mismo.
¿Cuáles son sus síntomas?
Las primeras y principales manifestaciones del virus son respiratorias, presentando tos, coriza, estornudos, estertores traqueales, ojos acuosos, letargo, así como descarga nasal y ocular, lo que hace que las aves (especialmente las jóvenes) se muestren deprimidas y se agrupen bajo la fuente de calor.
En una fase mucho más severa de la enfermedad, las aves presentan infecciones nefropáticas que generan riñones hinchados con túbulos distendidos y uréteres con cristales de urato.
Prevención y control |tratamiento bronquitis infecciosa
La principal estrategia de control y prevención es la aplicación de vacunas que combinen las distintas cepas del virus, es decir que contengan cepas homólogas, ya que los anticuerpos neutralizantes inducidos contra una cepa no reaccionan de forma cruzada contra otras cepas.
Otro mecanismo importante es el uso de calor, detergentes y desinfectantes comunes, considerando que el virus es bastante lábil y puede ser destruido por ellos. En las prácticas básicas de higiene se puede dar una efectiva prevención y control de la enfermedad, con productos tales como:
–VIROCID: Recomendado para cualquier tipo de superficie en la industria pecuaria como: paredes, techos, pisos, equipo y todo material que esté en contacto con los animales. Usado para desinfección completa de casetas, así como en exteriores (arcos sanitarios, vados sanitarios, tapetes sanitarios, botas, vehículos), en incubadoras (cualquier zona que necesite ser desinfectada) y rastro (desinfección completa, excepto las zonas en donde haya contacto con el pollo a partir del chiller).
–BIODES NF: Es un desinfectante de uso externo para el control de la contaminación microbiana como bactericida, fungicida y viricida.
–CID 20: Es un desinfectante muy eficaz contra bacterias, esporos, virus y hongos. Muy adecuado para desinfectar establos, superficies, herramientas, equipos de transportes para el ganado, incubadoras y mataderos.
–BIORAL H120 NEO: Es una vacuna en comprimidos efervescentes, que contiene la cepa Mass H120, contra la enfermedad de la bronquitis infecciosa aviar.
Fuente: Grupo Interagro – interagro.com.pa | 
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